Pareja evolutiva – La «pareja» es uno de los temas que más preocupaciones y desilusiones trae a la sociedad. Es un asunto muy delicado, y cada caso en particular es un mundo entero de por sí, pues los caracteres y las situaciones personales que hemos vivido nos hacen únicos, aunque hay bastantes puntos de estructura común que podemos analizar. Así pues intentaré abarcar lo máximo posible y dar claves que puedan ayudarnos a crecer y a tomarnos la vida de una manera más jovial y divertida. Porque al final lo que necesitamos es un poco de diversión en esta vida, un poco de sal que nos impulse y nos haga movernos.
Es cierto que siempre se espera de las personas que se desarrollen en lo profesional pero sin olvidarse de lo afectivo y, efectivamente, no debemos descuidar este apartado tan importante para nosotros, la pareja. Tanto ha cambiado la organización social que ahora estamos algo perdidos en esto del amor, de la familia, porque antes estaba clarísimo y así hicieron nuestros abuelos, eran parejas perfectamente complementarias, el hombre aportaba la mitad de la naranja por medio del trabajo y del dinero y, la mujer, que normalmente se quedaba en casa cuidando de los hijos, trabajando en casa, etc., era la que se ocupaba de las relaciones sociales. Así pues ella aportaba la otra mitad de la naranja y eran dos mitades que se complementaban, cada uno sabía perfectamente cuál era su lugar, y desarrollaban sus roles sin más.
El problema está ahora en que cada uno de nosotros somos naranjas completas, que eso está ¡genial! pues cada uno es dueño de su dinero, de su vida, se desarrolla laboralmente y tiene esa independencia y esa libertad que da, pero a su vez hay mucha competitividad y mucha exigencia a nivel laboral que crea estrés, tensión y baja autoestima. Luego vienen los hijos, y es cuando las mujeres se sienten mal por no poder dedicarles el tiempo que necesitan, en general hay mucho estrés y mucho descontento. Es cierto que en este mundo de tanta competitividad en que la mujer se iguala al hombre en lo laboral, ya parece que no queda tiempo para el amor, y es una verdadera lástima pues todo es importante para desarrollarnos plenamente, lo laboral y lo emocional.
En realidad tendríamos tiempo para todo lo que quisiéramos hacer si nos organizásemos bien y dedicásemos un rato cada día a nosotros mismos y a nuestro cuidado personal, otro rato para la pareja y otro rato para la familia y los hijos. El rato puede ser de 15 minutos, pero en ese tiempo, realmente tengo que estar al 1000×1000 ahí, no estar con alguien pensando en otras personas, o pensando en otros problemas porque entonces es cuando realmente no estás ahí ni en ningún sitio.
¿Qué es la pareja?
Una pareja es todo lo que hace par, como una pareja de calcetines o de zapatos, una pareja que haces cuando quedas con un amigo para tomar café, una pareja que haces con tu jefe en la oficina, etc., a lo largo del día vamos haciendo binomios con la gente con la que nos relacionamos. Pero aquí vamos a centrarnos en trabajar la pareja amorosa.
En una pareja lo importante es saber guardar una parcela de individualidad, es decir que yo soy yo y tú eres tú, otras veces somos nosotros juntos, pero seguimos teniendo una vida como individuos, y luego compartimos como pareja.
Digo lo importante de conservar la individualidad porque la pareja generalmente «no es para siempre», y tomar conciencia de eso realmente nos ayuda a disfrutarla más y aprovechar más los momentos, en lugar de apalancarnos y dejar que pasen los años, conformarse sin pedir, sin intentar mejorar. Eso sí, si una pareja está evolucionando constantemente sí que puede durar y disfrutarse.
Toda la vida, eso seguro, estarás contigo mismo, con tu propio cuerpo, desde que naces hasta que mueres, y es eso lo verdaderamente importante, porque si uno no está bien consigo mismo lo que no va a poder es tener una relación sana y armónica con nadie.
La pareja, por tanto, debería llegar a la vida como impulso, como motor de movimiento, como alimento, como gasolina. Y así llega, es esa chispita, esa ilusión, esas mariposas en el estómago las que nos sacan nuestra mejor sonrisa.
Pero luego viene la realidad, pues el enamoramiento dura un tiempo, luego somos dos personas que tenemos problemas; con nosotros mismos, en el trabajo, con el dinero, con otras facetas de la vida, y entonces es ahí cuando hay que volver a recolocarse, reencontrarse y apoyarse.
Os invito a escuchar vuestras propias necesidades, y ver si sois capaces de compartirlas con la pareja y de hacerlas realidad, pues eso es lo que os va a nutrir, lo que va a haceros crecer y evolucionar que es para lo que venimos a esta vida, a aprender y crecer.
Seríamos mucho más felices si nos tomásemos la vida como un juego, en el que lo que más nos puede pasar es que nos caigamos y tengamos que levantarnos de nuevo. Así mismo, la pareja sería otro juego igual y mucho más gratificante y mucho más divertido.
Quiero encontrar una pareja, ¿qué puedo hacer?
Me gustaría volver a puntualizar que para tener una pareja armónica es bueno que antes te conozcas a ti mismo y te trabajes para encontrarte mejor, pues muchas veces se busca pareja para tapar vacíos de la propia persona y ahí es donde vienen los conflictos.
Si te encuentras bien en tu vida pero sientes que te falta un compañero al lado estás en el momento de buscarlo, pero es importante que hagas lo siguiente para que no te pierdas en el camino:
1. CUÍDATE: Arréglate, haz ejercicio, pasea, cuida tu imagen, pues esto hará que te sientas mejor contigo mismo y que suba tu autoestima. Pero cuando encuentres a la pareja, sigue cuidándote, ese es el lema que hay que tener claro para que las cosas funcionen, porque cuidarse es para uno mismo, no es arreglarse solamente para ir a una fiesta ni ir al gimnasio para gustar a otros, ojo y ¡cuidado! Porque si uno lo hace así, al final lo que acaba es engañándose a sí mismo y sintiéndose peor.
2. MUÉVETE: Es decir, no van a venir ni el príncipe ni la princesa a buscarte a tu casa, están fuera, en la calle, en la vida, y hay que moverse en diferentes círculos para encontrarlo. Da paseos, ve a grupos de solteros, viaja, sal, haz actividades que te apetezcan y con gente, haz un perfil de Internet.
3. DEFINE a tu pareja ideal: porque sí que existe. En una hoja de papel haz una lista de las cosas que crees importantes para la persona que te gustaría atraer, tanto físicamente, como caracteres de personalidad, como actividades profesionales, o perfil social, etc., todo, cuanto más concreto mejor. Esto te ayudará a ir perfilando y sabiendo realmente lo que quieres (que suele ir variando con el tiempo).
4. NO TE OBSESIONES: Si das todo el poder a buscar pareja (o a cualquier cosa en general) lo que te va a provocar es sentirte mal y angustiarte cuando veas que no lo logras. La pareja es una parcela más pero no es lo único que puede hacerte feliz.
Importante: ¡No decaigas! Habrá muchas personas que te digan que «no», pero no te bloquees ni te hundas con eso, pues después de recibir muchos noes llegará el «sí» a tu vida. Ánimo y a disfrutar.
Tengo una pareja, ¿cómo puedo mejorarla?
1. LA COMUNICACIÓN: es la clave de todo, desde el primer día. Todas las palabras, por tontas que te parezcan, que no digas te las vas tragando, y al final, si no las sacas de algún modo, te harán enfermar.
Habla con tu pareja de cualquier tema que te preocupe, intenta, con respeto y sin herir los sentimientos del otro comentar lo que te gustaría trabajar, mejorar o cambiar o cómo te gusta que te traten, pues muchas veces pensamos que el de en frente debe ver lo que nos pasa, así sin más, debe leernos el pensamiento y eso no siempre sucede.
Además si entras en el silencio te puedes bloquear, paralizar, y eso hace que tu mente se llene de fantasías y tonterías y obsesiones que crearán un muro frente a la otra persona. Así que, dilo aunque te parezca una tontería porque eso te ayudará a que tu mente se limpie y tu cuerpo esté tranquilo. Al final lo importante es estar bien con uno mismo.
2. LA ILUSIÓN: Ilusión es sentirme vivo, receptivo en cada momento y estar abierto a las oportunidades que la vida me ofrece y trabajarla en la pareja es fundamental.
- Cuando en la vida todo lo tenemos preestablecido, siempre sabemos lo que va a acontecer, todo está pautado y programado de antemano, si las personas dentro de la pareja llevan vidas rutinarias y monótonas eso lleva a un agotamiento psicológico tal que nos van alejando de la palabra ilusión cada vez más.
- Para conectar con la ilusión es bueno que potencies todo lo que haces en el día nuevo, lo que aportas diferente, que te saque de la palabra rutina.
- Es importante que lo que no te gusta de tu entorno porque te resta, te merma la energía, lo quites y lo apartes de ti. Eso te ayudará a estar más en el «sí» de la vida y se reflejará en ganas de hacer y emprender. Si esto lo transfieres a tu relación de pareja, ambos encontraréis cosas que os ilusionen y os den fuerza y ganas de estar juntos para compartir y avanzar.
- Busca un hueco cada semana para iros solos en pareja a hacer algo que os guste, a cenar, al cine, a pasear, etc. Estos momentos son básicos para seguir siendo la pareja que empezasteis a ser. La ilusión por un viaje, una actividad conjunta, o cosas nuevas que probar juntos aviva la llama de la ilusión entre los dos. Tener metas que lograr juntos os unirá y hará que el movimiento esté presente y que la pareja se oxigene.
3. LA SEXUALIDAD NO DEBE DESAPARECER: la energía sexual es la más elevada que tenemos en el cuerpo y nos ayuda a desbloquearlo y limpiarlo. Nunca pienses que no necesitas la sexualidad, que eres muy mayor, o que no tienes tiempo, o que no encuentras el momento ideal. Hay que trabajarla tanto a nivel personal como en pareja, y aunque haga tiempo que la tengas olvidada o abandonada debes retomarla y al principio obligarte a moverla, tanto tú solo como con tu pareja, tómalo como un juego (siempre desde la libertad y desde el respeto, pidiendo lo que necesitas y hablando con tu compañera/o).
Importante: Tener pareja es un trabajo más en la vida así que hay que cuidarla. Nunca olvides arreglarte, sentirte guapa/o y atractiva/o. Es importante que la imagen que vea de ti tu pareja sea de una persona cuidada porque si no a la larga dejará de sentir atracción por ti y eso acabará por romper la pareja. A todos nos gusta lo bonito, lo sutil y lo armónico de la vida.
No sé si esta persona es para mí, ¿qué puedo hacer?
Lo importante para que una pareja fluya es la comunicación. Si hay una base buena de comunicación todo es posible y se puede avanzar y trabajar para ir mejorando juntos día a día.
Las bases de una pareja positiva, evolutiva y en crecimiento son que nos sintamos complementados y paralelos el uno con el otro, y que para nada uno se sienta superior al otro, pues es ahí donde empiezan las faltas de respeto que nos llevan a distanciarnos, a cerrarnos y a estar viviendo en el mutismo, que a la larga nos hará ir por caminos distintos cada uno.
Cuando una relación entra en la rutina, entra en el distanciamiento y en el descontento, falta la comunicación, pero intentamos conformarnos con lo que tenemos porque tenemos miedo a la soledad, y realmente con el paso del tiempo lo que hay es un muro entre estas dos personas que hace que ya no exista nada entre ellos.
La mente intentará parchear con excusas esta situación de pareja que ya no habrá por donde parchear. Y acompañando al mutismo aparecerá una mala contestación y con ella un grito y eso hará fisuras en la relación hasta quedarse en la nada. Entonces:
- Podemos vivir en esa nada para siempre.
- Podemos convertirla en un hasta aquí, y empezar a hacer algo.
Es difícil poner fin a las cosas, nos cuesta tanto empezar de nuevo porque caemos en la trampa de la soledad, pero es mejor estar solo desde lo real que estar en esa soledad acompañado pues esto es lo que nos envejece y no nos permite avanzar hacia nuestro destino.
Vamos a ver pasos que nos pueden ayudar a evaluar si estamos a tiempo de salvarnos del naufragio o que nos van a dar fuerzas para vencer la sensación de fracaso y abandono y comenzar una nueva vida, porque nunca es tarde para hacerlo.
1. ESCÚCHATE: reflexiona sobre tu vida, tus logros y tus metas. Eso te ayudará a coger fuerza y valorar toda la trayectoria, las luchas y los obstáculos que has podido capear y te posicionará en el presente para poderte plantear dónde quieres llegar, qué quieres conseguir en un futuro próximo. Esto deberíamos hacerlo todos de vez en cuando para valorarnos.
2. HÁBLALO: Si te sientes mal, si ves que hay cosas que necesitas y que no estás consiguiendo debes hablarlo, buscar juntos una solución. Es importante cambiar y no conformarte, la gente se conforma porque no cree en la posibilidad de que eso cambie y no es verdad en absoluto.
3. INTÉNTALO: Si lo has intentado y ves que sigues queriendo cosas diferentes que tu pareja es el momento de seguir avanzando y viviendo. Haz un listado de las cosas que te gustan de la persona y otro listado al lado de las que no te gustan. O puedes hacerlo igualmente con lo que te aporta y con lo que pierdes estando en pareja.
Así verás claramente lo que va pesando más de las dos partes.
Hay otro prisma de pareja que está ahí fuera, esperándote. Es la pareja que te hace avanzar, reír, te estimula y te realiza en tu parte sexual y emocional. Es la pareja positiva, la que te hace ser tu mismo y ver tus capacidades y tus ganas de…
¡Ánimo y a disfrutar!
Basado en el Libro de María Gemma Sáenz: «La pareja ¿complicación o acierto?, Ed. Mandala
Belén Aragón Pellicer
Lcda. Ciencias Biológicas. Reequilibradora Corporal TRCD.
Estilismo y Peluquería Emocional
http://masajesreequilibrio.blogspot.com.es