Adentrados ya en el siglo XXI, la Acupuntura, una técnica
vigente desde hace más de 5.000 años, está cada vez más presente en nuestras
vidas gracias a un sistema innovador que facilita la labor del terapeuta.
La Restauracion Bioenergética, conocida también como la
«Nueva Acupuntura», es un método no invasivo; no hay que clavar nada, ya que no
utiliza las clásicas agujas, con lo que elimina sus posibles riesgos, actuando
sin dolor. Siendo así mejor aceptada por las personas que temen a los pinchazos.
En su lugar lo que se utiliza son pequeños fragmentos de cuarzo montados en un
autoadhesivo, que se aplican superficialmente en la piel sobre los puntos de
Acupuntura.
Desde tiempos inmemoriales está utilizando la humanidad los
cristales de cuarzo. El cuerpo funciona con pequeñas corrientes y campos
eléctricos. Todas las membranas de la célula tienen una polaridad eléctrica.
Cuando un tejido es estimulado, con cuarzo los iones cambian de lugar a través
de la membrana, intercambiando la polaridad por un momento. Después vuelven a
sus lugares normales. Este cambio del potencial eléctrico se mueve a través de
las células como si fuera verdadera corriente.
Estos pequeños cuarzos que denominaremos RB, han sido
previamente programados. Por lo que a las propiedades inherentes de modular las
energías, propias del cuarzo, se añade la vibración que se les ha introducido.
De manera que el cuarzo sirve de vehículo o soporte transmisor. Para
comprenderlo mejor pongamos como ejemplo un CD o disco compacto, el cual
almacena información en su superficie, que luego se convierte en sonidos,
imágenes o textos… el CD es el soporte de esa información.
La Nueva Acupuntura no invasiva, consiste en la aplicación de
pequeños fragmentos de cuarzo previamente sometidos a dos vibraciones
determinadas, máxima y mínima, (en términos de Medicina Tradicional China, Yang
y Yin), que al aplicarlos sobre la piel reproducen dicha frecuencia haciendo
resonar a los puntos de Acupuntura, obteniendo de estos, mejores resultados que
con agujas. Se trabaja con dos tipos de RB, unos programados con la frecuencia
Yin y otros con la frecuencia Yang. Estas dos frecuencias son las que viajan por
todo nuestro cuerpo por los meridianos que estudia la Acupuntura.
En los procesos de adaptación al medio externo, que realiza
nuestro organismo, contra las perturbaciones medioambientales, los disturbios
psíquicos o emocionales, y los errores dietéticos, se originan desequilibrios a
nivel de los diferentes meridianos, los cuales deben ser regulados. La
Restauración Bioenergética restablece de nuevo el equilibrio en estos canales,
con la aplicación de los RB, el que posee la frecuencia Yang como estimulante o
el que tiene la Yin como inhibidor, y sin necesidad de utilizar las agujas.
El sistema tiene otra ventaja añadida: basándonos en un test
neuromuscular usado en Kinesiología, determinamos sobre qué puntos es necesario
actuar. Humilde pero firmemente lo que pretende, es mostrar al terapeuta que los
casos no siempre son iguales, que hay que detenerse a pensar, a razonar, a
renovar, a no aplicar formulas memorizadas. A descubrir la etiología y desde un
punto de vista holístico, efectuar un tratamiento de fondo, no un mero e
incompleto procedimiento sintomático o paliativo.
De acuerdo con la teoría de la medicina tradicional china, el
dolor indica que existe un bloqueo en el flujo de la energía vital (Qi) en
alguno de los canales llamados meridianos. El tratamiento por lo tanto sería
movilizar ese bloqueo y aliviar localmente el dolor. Para resolver los propios
problemas que se desarrollan en los meridianos, a veces es suficiente el uso
solamente de los puntos locales; esto explica cómo ciertos tratamientos que sólo
tienen en cuenta a estos puntos obtienen resultados. Pero es mucho más frecuente
y terapéutico la utilización de los distales.
En las patologías debidas o en las que están ya implicados
los órganos, es fundamental el uso de los que se encuentran alejados
aparentemente del problema, de ahí el llamarlos distales. Sólo un buen terapeuta
es capaz de elegir los puntos convenientes en cada problema aunque no parezcan
tener relación con el mismo. La Medicina Tradicional China dice: «lo alto se
debe tratar en lo bajo, lo izquierdo en lo derecho», etc. Para realizar esta
elección, es necesario tener unos grandes conocimientos de las bases de la
energética humana, y aún así nos lleva a errores, o un buen protocolo que nos
sirva de guía y que analice las posibles alternativas.
El protocolo que utilizamos en Restauración Bioenergética,
permite que, siguiendo sus pasos, avancemos y descartemos las posibilidades, y
al hacerlo, con un orden y esquema predeterminado, evitamos olvidar o pasar por
alto algún punto beneficioso, o incidir en los inservibles, o aumentar el número
de los que usemos.
Ventajas de la Restauración Bioenergética
? Consiste en un protocolo muy bien definido que estructura
el tratamiento, en tres pasos fundamentales, evitando dispersarse en líneas
terapéuticas no eficaces.
? Funcionalidad:
– Ya que al ser un material desechable autoadhesivo, puede
ser usado por el propio enfermo sin ningún riesgo.
– Así como las agujas necesitan un tiempo de actuación y
permanencia del paciente en camilla, los Restauradores Bioenergéticos no
necesitan de ese tiempo ya que, por un lado actúan en dos o tres minutos y por
otro, como van adheridos a la piel, son transportables, reduciendo por lo tanto
el tiempo de permanencia en camilla.
– Se puede practicar el tratamiento en cualquier posición,
como puede ser la de sentado.
– Seguridad, no utiliza agujas, por lo tanto evita los
riesgos que éstas pueden producir.
– El paciente no siente dolor al aplicar la técnica, ya que
ésta no es invasiva.
La Restauración Bioenergética es un método crítico y
esclarecedor, que posibilita al terapeuta a realizar tratamientos personales,
exclusivos, ajustados al individuo y sus circunstancias, para no tener que
arrastrar recetas dictadas de unos textos a otros.
Otra gran diferencia, es utilizar los menos puntos posibles,
nunca con una fórmula fija, que habrá que determinarlos en cada individuo y en
cada caso particular, manejando únicamente los necesarios y en el lado del
cuerpo que así sea. La Acupuntura clásica, utiliza los puntos en ambos lados del
cuerpo, la Restauración Bioenergética usa solamente el que esté desequilibrado o
el del lado derecho o el del izquierdo, pero nunca los dos, para eso utilizamos
el test y así lo determinamos.
Por el propio principio Taoísta, el cuerpo está formado por
dos mitades: una Yang, generalmente al lado izquierdo y otra Yin en el lado
derecho. Si un organismo tiene un desajuste o desequilibrio, por ejemplo, hacia
un exceso de Yang, lógicamente basándonos en lo anterior no podremos corregirlo
de igual manera en la mitad Yang del cuerpo que en la mitad Yin.
La Restauración Bioenergética beneficia la labor del
terapeuta, al poderse aplicar el propio enfermo en su casa los RB en los
periodos de tiempo que transcurren entre una sesión y otra, que generalmente se
realizan una vez por semana, prolongando y potenciando el efecto de éstas. No es
un sistema de mera regulación, sino de restauración de las energías, mediante el
aporte externo de una «información», almacenada en pequeños fragmentos de
cuarzo, que denominamos RB. Estos logran la estimulación permanente de los
puntos energéticos, sin riesgos ni consecuencias desagradables
Esta técnica analiza y comprueba al organismo en su totalidad
de una manera sencilla segura y no invasiva. Están sobradamente probados y
contrastados sus resultados en los más de diez años en que se está utilizando.
El primer libro sobre Restauración Bioenergética se publicó en 1994 y desde
entonces muchos han sido los frutos y las satisfacciones.