Curar a los animales a través de la Reflexokinesia

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    La Kinesiología, tan conocida
    porque se utiliza para calmar y paliar dolencias de los bebés, ahora adquiere un
    nuevo enfoque: la curación de los animales, a nivel físico y emocional


    P
    ara comprender qué es la
    Reflexokinesia hay que tener en cuenta que es una técnica con un enfoque
    interdisciplinario del cuidado de la salud, utilizando las herramientas de las
    medicinas complementarias, creando una disciplina capaz de evaluar y corregir
    las diferentes disfunciones.

    Se suelen utilizar test musculares como
    forma de evaluación neurológica funcional, evaluación del rango de movimiento,
    palpación estática y análisis de movimiento.

    Además, se parte de las investigaciones
    originales del Dr. George J. Goodheart, iniciadas en 1964 y ampliadas hasta la
    actualidad, denominada Kinesiología Aplicada.

    El Dr. Goodheart y otros destacados
    quiroprácticos han desarrollado diferentes métodos para mejorar la función
    neuromuscular, evaluada a través del test muscular y luego aplicada en su
    corrección.

    Se puede destacar que los objetivos de
    esta técnica son, fundamentalmente, colaborar con el propio sistema, para el
    mejor equilibrio y aprovechamiento de su energía y recursos. Así, se consigue
    una mejor calidad de vida.

    Bienestar de los pacientes

    José Domenech lleva unos 14 años
    practicando esta disciplina, que aplica también a los animales, para un mejor
    bienestar de los mismos. «De ese tiempo dedicado a la práctica, unos 10 años he
    estado como instructor ayudante, y unos 8 años dando cursos de introducción a la
    RK para diferentes colectivos que buscan un enfoque diferente dentro de las
    terapias. También he realizado cursos específicos para el mejor rendimiento de
    los animales, dirigidos a sus dueños, educadores y veterinarios», nos comenta.

    Domenech decidió abordar este campo, en
    primer lugar, porque conocía esta técnica como paciente y los resultados -según
    explica- «fueron impresionantes, sin manipulaciones fuertes y con una visión
    adecuada y específica para mí como paciente. La Reflexokinesia contempla a cada
    individuo como un ser independiente y único, por lo que cada terapia por el
    mismo proceso puede ser diferente desde el punto de vista emocional,
    nutricional, estructural, etc.».

    También se interesó por la misma como
    profesor de Tai-Chi, con el fin de mejorar la coordinación y aumentar la energía
    de los alumnos.

    Respecto a su base, derivada de diferentes
    tipos de medicinas tradicionales es importante destacar que la Reflexokinesia se
    nutre de diferentes técnicas como la Acupuntura, el Ayurveda, la Polaridad,
    todas las técnicas Kinesiológicas y algunas propias de la RK.

    En definitiva, lo que aportan son una
    mejor visión del proceso del ser humano, y su comportamiento global.

    La Medicina Veterinaria, por su parte,
    contempla este campo, pero es una técnica que se utiliza en otros países y que
    en éste ha sido mal enfocada. No se creó directamente para los animales, sino
    que, en la actualidad, se realiza para el tratamiento de los bebés.

    Sin embargo, ahora se ha empezado a
    utilizar para los animales consiguiendo grandes resultados. Esto viene a cubrir
    otra forma de enfocar un tratamiento, ya que lo importante es tener los mejores
    recursos para el mejor resultado con los pacientes. «Creo que esta es la misión
    y el enfoque de todos los que de una manera u otra nos dedicamos a esta
    profesión».

    Para ello, cuando hay un animal con un
    determinado problema, las pautas a seguir por parte del terapeuta que lo asiste
    es tranquilizarlo, y a veces al dueño, y realizar diferentes preguntas para
    averiguar cuél es el proceso que le causa esa disfunción.

    Además, el test muscular se realiza en el
    dueño o educador, ya que es un contacto directo que da una respuesta
    neurológica.

    Respecto a los beneficios concretos que
    aporta para los animales esta terapia, que ya se viene utilizando en EE.UU., son
    muchos: liberación de atrapamientos nerviosos, mejora del movimiento articular,
    mejora nutricional, regulación del sistema emocional, recolocación estructural,
    etc.

    Estos peculiares pacientes no sufren
    ningún tipo de dolor o riesgos cuando se les está practicando la Kinesiología, y
    así lo confirma Domenech: «No sufren nada. La terapia que se realiza tiene
    diferentes modos y formas para saber que la técnica que en ese momento se está
    realizando es segura y fiable. Para poder aprenderla deseamos realizar un curso,
    con el fin de que los alumnos estén seguros de su técnica».

    Los problemas para los que está indicada
    esta práctica es para cualquier disfunción, entendiendo que toda técnica tiene
    sus limitaciones.

    Por supuesto, es importante que el propio
    paciente sepa que la solución de un problema puede no funcionar igual, aun
    siendo la misma dolencia.

    Para hacernos una idea muy general de cómo
    se actúa con los animales, ya que ellos mismos no pueden indicarnos qué les
    pasa, el terapeuta nos cuenta cómo se procede: «Se testa como, hemos dicho
    anteriormente, a través del dueño o educador, y se le realizan los tes
    musculares con una técnica llamada de transferencia».

    Intervención del dueño

    Por su parte, el dueño del animal también
    interviene directamente tocando y creando un circuito eléctrico entre los dos.
    «Pensar que si toco un enchufe y alguien me toca, la corriente pasa a él y
    recibe la descarga energética ¿Los seres vivos tienen energía? Mi sugerencia es
    que toque quien sabe».

    Lo que sí está claro es que se actúa de
    una determinada forma u otra en función de sus padecimientos. «Está claro que se
    trata diferente un problema emocional, donde se daría, por ejemplo, flores como
    las de Bach o, por otra parte, se realizaría estructura, chequeo de hueso y
    articulaciones, nutrición, se prueban productos o puntos reflejos que pueden dar
    carencias nutricionales, entre otras cosas».

    También es posible utilizar otras terapias
    alternativas para estos pacientes tan especiales, como son la Acupuntura, la
    Osteopatía, la Fisioterapia, la Polaridad, etc.