La rumba en Cuba es una manifestación popular que surge entre
los sectores más humildes de la población de La Habana y Matanzas, a finales del
siglo XIX. Los solares-casas con varias habitaciones alrededor de un patio
central- el puerto, los despachos de bebidas, las esquinas… En definitiva, «la
calle», son los lugares donde crece y se desarrolla. Es ahí que, para alegrar
los ratos de ocio, nace la rumba como una fiesta informal que puede llevarse a
cabo en casi cualquier lugar, en la sala, en los pasillos o en el patio.
Los instrumentos de la rumba suelen ser tres tambores
abarrillados: quinto, salidor y tres-dos, estabilizados rítmicamente por la
clave y el catá. Un catante solista y el coro. La «clave» son dos palillos de
madera dura que ejecutan un ritmo de dos-tres golpes y el catá suele ser un
trozo de bambú hueco que se percute con dos baquetas, la clave y el catá llevan
el ritmo y el ye l tiempo. También suelen utilizarse tres cajones de madera y
originalmente las rumbas se ejecutaban con lo que hubiera a mano, cajones de
armarios o de bacalao salado, taburetes, cucharas, etc.
Las tres variantes de la rumba
El ambiente de la rumba en sus orígenes y en la actualidad
(más allá de las representaciones folcklóricas) es marginal, no exento de
violencia y siempre regado con buenas cantidades de ron. Sigue viva porque
cualquier pretexto vale para montar una rumba y si no hay instrumentos como las
tumbadoras, se puede hacer una rumba con lo que haya a mano, una mesa o unos
cajones sirven para «formar una rumba». Se pueden reconocer tres variantes
dentro de la rumba: el yambú, la columbia y el guaguancó.
El «yambú» o «rumba de tiempo España» es una modalidad más
lenta y cadenciosa en el ritmo y tiene la particularidad de que «no se vacuna».
El «vacunao» es un movimiento de la pelvis del hombre hacia la pelvis de la
mujer, que indica la posesión. La «columbia» es una modalidad más rápida en lo
rítmico y más acrobática en cuanto al baile. Generalmente la bailan solo los
hombres y su procedencia es rural, la columbia es del monte y originaria de la
región de Matanzas.
El «guaguancó» es la modalidad más extendida y rica en lo
musical, lírico y coreográfico. A un tiempo medio, acompaña un baile que simula
un cortejo de pareja, un juego de acercamiento y distanciamiento, que alcanza su
punto más característico en un movimiento pélvico llamado «vacunao», con el que
el hombre intenta poseer simbólicamente a su compañera de baile. La estructura
musical se puede dividir en tres partes: una diana al comienzo que da inicio a
la rumba, una parte donde el solista canta y expone el tema d ela rumba y la
tercera, un mambo donde los asitentes cantan un estribillo contestando al
solista. En la actualidad, la rumba subsiste como un elemento folclórico muy
importante en Cuba, que resume su herencia africana. Sin embargo, su
trascendencia para la escena musical actual reside en el hecho de que muchos de
sus elementos musicales y coreográficos han sido adoptados por los grupos de
salsa y son; y con ello lo han proyectado hacia la música popular universal,
para que podamos disfrutar de la riqueza rítmica de este género afrocubano.