Gyrotonic es una técnica novedosa que introduce movimientos circulares,
lo que supone grandes beneficios para nuestro organismo. Nace en Estados Unidos
de una mezcla de principios del yoga, el Tai Chi, la natación, la danza
y la gimnasia deportiva. Julio Horvart, su creador, un húngaro criado
en Rumanía, desde muy joven practicó gimnasia y natación,
a los diecinueve años se dedicó a la danza con éxito llegando
a ser primer bailarín de varias compañías. Sufrió
una lesión que le apartó definitivamente del baile. Viendo que
ningún tratamiento le ayudaba a recuperarse, comenzó a practicar
yoga y a interesarse por todo tipo de técnicas terapéuticas.
Tras veinticinco años de estudios y de prácticas, comenzó
a desarrollar su particular método basado en disciplinas orientales.
En Gyrotonic no sólo se trabajan los músculos, tendones y ligamentos
sino que va más allá e incorpora la respiración como elemento
fundamental. La respiración sincronizada con el movimiento potencia el
efecto de ambos. “Se utilizan distintos patrones según el movimiento
que se realiza. Por ejemplo, hay respiraciones que ayudan a limpiar el cuerpo
y expulsar toxinas, otras que activan el sistema nervioso, hay respiraciones
de fortalecimiento que varían según la intensidad y la velocidad.
En cualquier caso, al principio enseñamos los movimientos y una vez aprendidos
vamos introduciendo patrones respiratorios que son más complejos”,
comenta Juan Rúa, profesor de Gyrotonic. Estas respiraciones unidas a
los movimientos circulares estimulan el fluir natural de la energía lo
que beneficia a la regeneración de los órganos internos.
El Ejercicio más Natural
Nuestros movimientos, nuestras articulaciones no son lineales. Son circulares.
No sólo arriba y abajo, adelante y atrás, sino también
arqueando, realizando círculos y ondulaciones. Gyrotonic incorpora estos
movimientos naturales lo que le permite trabajar el sistema esqueleto-muscular
en su totalidad, proporcionándole mayor equilibrio y evitando lesiones
o traumas de cualquier tipo a la vez que le ayuda a una mejor y mayor recuperación
de cualquier tipo de problema.
No hay que olvidar que las articulaciones en sentido amplio, es decir, incluyendo
la columna vertebral, son las partes que más sufren los malos hábitos
posturales y gimnasias inadecuadas, lo que acaba limitando nuestros movimientos.
La mejor manera de prevenir y curar es fortalecer y flexibilizar los ligamentos
y tendones que las envuelven. Con los ejercicios lineales que se practican en
los gimnasios convencionales, tan sólo se realiza éso en una pequeña
medida, ya que el trabajo se ejecuta únicamente en dos direcciones lo
que limita el desarrollo completo de la articulación. Algo que no sucede
con los movimientos circulares, ondulatorios de Gyrotonic que permite un desarrollo
pleno. Más aún, este método, al contrario que otros que
contraen y congestionan la articulación, ayuda a liberarla, a crear el
espacio necesario para que pueda moverse libremente sin ningún problema.
Ese espacio ganado necesita un soporte muscular para ser mantenido.
Fuerza y Flexibilidad
Si un músculo tan sólo se estira, se debilita; si únicamente
se fortalece se acorta y se tensa. Por eso es de vital importancia que ambas
posibilidades se trabajen conjuntamente. Es lo que hace Gyrotonic frente a otros
métodos, gracias a su peculiar diseño de ejercicios e innovadoras
máquinas. Estas máquinas además de introducir los platos
giratorios para los movimientos circulares, usan un grupo de poleas a diferencia
de las habituales que sólo utilizan una sola. Esta sencilla cuestión
numérica abre un abismo entre los resultados y beneficios que obtiene
nuestro cuerpo. “Cuando se trabaja con una sola polea se moviliza la cantidad
de kilos elegidos a la vez que la parada produce un tirón nada beneficioso
y su arranque requiere un gran esfuerzo. El uso de varias poleas hace que el
cuerpo sólo soporte el treinta por ciento del peso, lo que permite que
no haya impacto de parada y por tanto se puedan realizar movimientos fluidos,
más amplios, con cambios en cualquier dirección, incluidos los
círculos concéntricos y excéntricos implicando a un conjunto
mayor de músculos”, afirma José Domínguez, profesor
de Gyrotonic. Este original diseño crea un suave puente entre la extensión
y la contracción del músculo. Mientras unos músculos se
estiran sus antagónicos los soportan y se fortalecen, alternándose
constantemente sin ningún tipo de agresión.
Nada en este método es fruto de la improvisación, hasta las máquinas
están diseñadas con madera y suaves curvas para que a simple vista
resulten más relajantes y cálidas frente al frío acero
y ángulos rectos más agresivos de las convencionales.