La crisis económica supone un freno a la hora de que las mujeres maltratadas denuncien a sus agresores, según un informe de la Fundación Adecco, que indica que el 64 por ciento de las víctimas no sale de la espiral de la violencia por el temor a que si no encuentran trabajo se queden sin recursos para salir adelante.
En el informe “Mujeres Víctimas de la Violencia de Género y el Empleo” la Fundación Adecco ha encuestado a 600 víctimas que han acudido a sus oficinas en busca de una oportunidad laboral a lo largo de este año.
Preguntadas sobre si la difícil situación económica es un factor que ha mermado la voluntad de denunciar, la respuesta es afirmativa en el 64 por ciento de las mujeres, frente al 36 por ciento que considera que la situación económica no influye en este sentido.
La directora de Operaciones de la Fundación, Arancha Jiménez, ha opinado que la crisis puede incrementar la inseguridad de muchas víctimas, por lo que “ahora más que nunca” es necesario impulsar políticas que incentiven su participación en el mercado laboral y puedan recuperar así su dignidad y libertad.
Según el informe, estos datos demuestran que la crisis puede alargar el tiempo del maltrato y que el empleo “es una herramienta esencial para combatir esta lacra social”. De hecho, la mayor parte de las encuestadas, el 73 por ciento, no tenía empleo y el 76 por ciento ha apuntado que, si lo hubiera tenido, “se hubiera sentido más fuerte como para no tolerarlos”.
Respecto al perfil de la víctima que busca trabajo, la Fundación Adecco apunta que es una mujer de entre 36 y 45 años -en el 46 por ciento de los casos-, separada -el 47 por ciento-, con un hijo -el 58 por ciento- y con estudios básicos -el 44 por ciento-.
No obstante, en el informe se subraya que es difícil establecer un perfil, ya que “detrás de cada mujer hay una persona diferente”.
En cuanto a aquellas que ya han encontrado empleo, el 46 por ciento lo ha hecho en el sector servicios, y, en concreto, en los departamentos de atención al cliente; el 25 por ciento como teleoperadora; el 13 por ciento de cuidadora de mayores y dependientes; un seis por ciento como dependienta; y otro tanto por ciento como auxiliar administrativa.
Además, la mayor parte de ellas (el 56 por ciento) lleva de uno a seis meses en la empresa.
Fuente: Efe.