La hormona del amor
Investigadores escoceses podrían haber acabado con los misteriosos designios
del amor al descubrir que la capacidad del ser humano para mantener una relación
depende de una hormona denominada oxitocina.
Una investigación de las universidades escocesas de Edimburgo y Saint Andrews,
difundida recientemente, analizó las razones por las que las personas mantenemos
o no una pareja.
La responsable de los vínculos afectivos es la hormona oxitocina, causante
de los lazos que se crean entre una madre y su bebé recién nacido,
y que influye de la misma forma en la unión entre dos amantes.
Los expertos aseguran que la producción de esta hormona está relacionada
con la capacidad para conservar una pareja durante un largo período de
tiempo, por lo que, a aquellas personas que la tengan en menor cantidad, les será
más difícil mantener una relación larga.
La oxitocina modifica millones de “circuitos” en el cerebro, por lo
que cambian la percepción e intereses de la persona.
Otro descubrimiento de estos científicos es que el olor que desprendemos
es tan importante como el atractivo físico a la hora de escoger a una pareja
estable.
“Como las relaciones duraderas requieren un mayor grado de compromiso, las
personas nos aseguramos de que toda la información disponible se adecúe
a lo que buscamos”, comentó Elisabeth Cornwell, del departamento de
Psicología de la Universidad de Saint Andrews.
“Al parecer -añadió-, cuando se busca una relación estable es más importante la concordancia entre el olor y el físico que cuando se quiere una esporádica”.
Las feromonas y el aspecto físico son importantes tanto para hombres como mujeres.