Los cuatro neurotransmisores son dopamina, acetilcolina, GABA y serotonina. Cada uno de ellos tiene sus propiedades y acciones específicas, y es posible que una persona tenga deficiencia o exceso de ellos. Esto es una de la causas de desequilibrios en el sistema; vamos a tratar de examinar a algunas de las probables causas de estos desequilibrios donde incluimos factores químicos, nutricionales, hormonales, electromagnéticos y emocionales.
Esta información sobre el cerebro es una primicia, sobre los últimos descubrimientos del cerebro relacionado con la kinesiología. Nosotros, los kinesiólogos, trabajamos con el sistema nervioso a nivel neurológico, nuestros métodos están basados en los neuro-receptores o receptores neurológicos, los cuales informan al cerebro del estado de todos los sistemas ya sea la estructura, la bioquímica, la energía y las emociones. Asimismo, tratamos de liberar antiguos patrones y compensaciones, para que el cuerpo se cure a sí mismo. La persona humana posee un potencial infalible para recuperarse a través de su «Inteligencia Innata», llamada médico interno u homeostasis. Esta «Inteligencia», está presente en cualquier parte de nuestro cuerpo, desde la célula hasta un órgano o hueso.
En la jerarquía de nuestro sistema nervioso, el cerebro es el que dirige todas las funciones. Si logramos que el cerebro logre ayudarnos a reducir interferencias, nuestro éxito con un paciente será espectacular.
Se llaman neurotransmisores a las sustancias químicas infinitesimales que se encargan de transmitir la información entre las distintas partes del cuerpo, y desde una neurona hasta la siguiente a través de la sinapsis, utilizan dos formas de transmisión: eléctrica y química. Las hormonas, por ejemplo, son neurotransmisores que viajan a través de la sangre. Los neurotransmisores conducen los mensajes a distintas zonas del sistema nervioso (cerebro, médula espinal y nervios).
También se encuentran en las neuronas motoras donde estimulan las fibras musculares para contraerlas. Ellos son producidos en algunas glándulas como la pituitaria y las suprarrenales. De todos los neurotransmisores, los más importantes son los de nuestro cerebro, por el control que ejercen sobre las neuronas, y por tanto, son los que voy a desarrollar en éste artículo.
¿Cómo podemos tener y disfrutar de una salud óptima en nuestra vida? Lo más importante de este método es tener la posibilidad de acceder a un código específico de nuestro cerebro, y podemos conseguirlo a través de restaurar los cuatro neurotransmisores o mensajeros químicos más importantes de éste.
Una vez que hemos encontrado un perfecto equilibrio, usted se volverá una persona energética, con su peso ideal, su memoria se incrementará y su potencial cognitivo será superior, se sentirá estable y menos ansioso, su estado de ánimo estará tranquilo y motivado y su sueño será reparador. Este estado de gran bienestar en todo el organismo, se mantendrá a través de su vida mientras el equilibrio de estos cuatro neurotransmisores del cerebro se mantengan.
Además de los neurotransmisores citados, otro de los conceptos que incluyo, es el de la dominancia. Cada uno de nosotros tiene por la genética o herencia un neurotransmisor dominante, el cual va a condicionar nuestra personalidad y nuestro comportamiento en general. Una vez que el terapeuta descubre este factor, está en el camino apropiado. El método para conseguir saber cuál es el neurotransmisor dominante, consiste en realizar un protocolo específico de kinesiología. Esto mostrará las tendencias de la personalidad. A qué tipos de enfermedades está más predispuesta, qué desequilibrio hormonal tendrá, por qué tiene ciertas ansias a ciertos alimentos y cuáles son más beneficiosos para ella, asimismo qué suplementos nutricionales necesitará su organismo, y así sucesivamente. Esta nueva información es muy emocionante y curiosa, permitiéndonos conocer más de nosotros mismos. Por ejemplo, una paciente tenía una dominancia de acetilcolina y conforme a estos descubrimientos tenía ansias de comer grasas, debido a una deficiencia de éste neurotransmisor, una vez que se la equilibró por kinesiología esas ansias desaparecieron y pudo perder peso fácilmente.
Estos cuatro neurotransmisores están asociados a cuatro zonas específicas del cuerpo. Y los nutrientes que se usan para la corrección química son bastante adaptógenos, lo que significa que pueden ayudar, si los neurotransmisores están en exceso o en deficiencia.
Realizamos todo este proceso a través de diferentes técnicas de kinesiología, a nivel neurológico, relacionadas con el nutriente específico que el cuerpo necesita, y con los diferentes puntos a activar con imanes en determinados campos magnéticos del cuerpo. Dopamina está asociada con las ondas de alto voltaje del cerebro, afectando al poder de la mente y del cuerpo. Si se encuentra en niveles normales nos sentiremos con mucha energía y con los reflejos muy rápidos. Estas personas son activas; saben lo que quieren y cómo conseguirlo. Pero con las emociones y los sentimientos no se sienten tan bien.
Si la persona tiene la dopamina en exceso, su naturaleza puede ser muy intensa, volverse agresiva y, probablemente, violenta. La dopamina crea un «terreno favorable» a la búsqueda del placer, así como al estado de alerta y potencia también el deseo sexual. Al contrario, cuando su liberación se dificulta (es decir, tienen el neurotransmisor en deficiencia), esta persona se sentirá menos energética, menos poderosa y tendrá problemas para pensar con claridad, puede aparecer desmotivación por la vida y depresión.
Si su predisposición o su naturaleza es acetilcolina, sus habilidades serán trabajar con los sentidos y ver el mundo en términos sensoriales. Su creatividad será muy alta y estará abierto a nuevas ideas. Este neurotransmisor regula la capacidad de retener una información, almacenarla y recuperarla en el momento necesario. Si el neurotransmisor está en exceso, estará en peligro de dar demasiado de sí mismo a los demás o volverse paranoide. Si por el contrario, la persona tiene deficiencia de este neurotransmisor, no puede reaccionar a estímulos sensoriales y se volverás olvidadiza. Perderá memoria y hasta en casos extremos, padecerá demencia senil.
La naturaleza GABA (ácido gamma-aminobutírico), se sintetiza a partir del ácido glutámico y es el neurotransmisor inhibitorio más extendido en el cerebro. El GABA actúa como freno de los neurotransmisores excitantes que llevan a la ansiedad. Estos factores desembocan en personas calmadas y juiciosas. Si ésta es su naturaleza, usted será muy formal y seria. Y su personalidad es ser dependiente y sacar suficiente provecho en el trabajo, también destacará por ser muy organizada.
Si ocurre que tiene un exceso del neurotransmisor se volverá más dependiente de su esposa/marido y de las figuras de autoridad, y le dará demasiada importancia a los juicios de los demás. Si tiene deficiencia, tenderá a sufrir trastornos de insomnio y ansiedad, si está ausente en algunas partes el cerebro, se produce epilepsia. Cuando cree que no consigue lo suficiente, se vuelve ansioso, nervioso e irritable.
Finalmente, si tiene dominancia en la serotonina, la característica es tener una personalidad muy alegre, vital y gran sentido del humor. Es una persona muy flexible y tiene la capacidad de vivir el momento. Está íntimamente relacionado con la emoción y el estado de ánimo; tiene un papel importante en conciliar el sueño y sensibilidad a las migrañas. El cerebro la utiliza para producir la melatonina.
Si tiene este neurotransmisor en exceso, la persona se siente inferior, inadecuada, vergonzosa, triste y miedosa. En el caso de que la persona tenga deficiencia de serotonina perderá sus habilidades para recargar su cerebro y le llevará a la depresión o a otros trastornos emocionales. Son personas que no duermen bien por la noche y suelen estar siempre cansadas. Tienen problemas con el control de la ira, el desorden obsesivo-compulsivo y el suicidio. Así, su deficiencia puede llevarla al incremento del apetito por los carbohidratos (comidas ricas en almidón).
La medicina oficial manda a los pacientes el conocido Prozac, para ayudar a las personas en la depresión, previniendo que las neuronas aspiren el exceso de serotonina, por lo que hay más flotando en la sinapsis. Es interesante recordar el dicho antiguo de tomar un vaso de leche caliente antes de dormir para conciliar el sueño, ya que también incrementa los niveles de serotonina. Este neurotransmisor se sintetiza a partir del aminoácido triptófano el cual se encuentra en la leche. La serotonina se fabrica en la médula ósea y en el intestino.
Por otra parte, la serotonina juega un papel en la percepción. Los alucinógenos como LSD funcionan adhiriéndose a los receptores se serotonina en las vías perceptivas.
Sexo y Cerebro
El Dr. Blue estudió y confirmó lo que ocurre en el cerebro y en el sexo, y que este factor depende de los neurotransmisores, neuropétidos y hormonas. El cerebro del hombre y de la mujer se diferencian en el tipo de hormonas que segregan, son productos bioquímicos que se distinguen entre sí en la forma que responden a estos agentes neuroquímicos, por ejemplo el neurotransmisor dopamina estimula a los hombres, pero no a las mujeres; mientras que la serotonina estimula a las mujeres.
Partiendo de esta base, el Dr. Blue desarrolló una técnica kinesiológica que demostró que a los hombres les hacía más falta la dopamina, y a las mujeres más serotonina. Los pacientes con la libido baja notaron un gran incremento en su interés sexual. Este trastorno puede ser químico o psicológico. También hay una relación con desequilibrios de la ATM (Articulación Temporo Mandibular).
La Serotonina es el neurotransmisor relacionado con la mujer, cuando sus niveles son altos, produce relajación y tranquilidad. Las mujeres cuando están bajo estrés no funcionan sexualmente, necesitan estar relajadas.
Dopamina es el neurotransmisor relacionado con el hombre, (está ligado a las catecolaminas) y al estrés cuando sus niveles son altos el hombre incrementa su actividad sexual. Cuando el hombre está bajo estrés necesita hacer el acto sexual. La energía sexual está relacionada con el éxito sexual.
La dopamina se segrega en las glándulas suprarrenales. Aumenta el deseo sexual, cuando un hombre se estresa lo primero que quiere es hacer el acto sexual. A través de ciertos test de kinesiología podemos medir los niveles de serotonina y dopamina.