¿Qué es la Hipnosis y cómo se accede a ella?
Es más fácil responderte qué no es la Hipnosis. Bien, la Hipnosis no es lo que usualmente la gente cree que es. Nos hemos acostumbrado a la manera en que el cine, la televisión y el teatro la presentan, casi como un poder mágico. Un estado de inconsciencia donde una persona manda y otra obedece, pudiendo ser forzada a hacer cosas ridículas en contra de su voluntad o a confesar lo inconfesable, sean cuales sean las consecuencias, olvidándolo todo al momento de despertar.
Eso no es Hipnosis. Eso es «show», espectáculo que se monta con algunos fenómenos hipnóticos y algunos trucos. Y apenas un 10-15% de la población puede alcanzar esos estados de sugestionabilidad extrema.
La Hipnosis no es un estado de inconsciencia. Al contrario, es un estado de «Hiperconsciencia», de consciencia expandida, solo que focalizada en un punto de atención: la voz del hipnotizador. Es un estado de trance y disociación en el cual todos los sentidos se agudizan. Un estado en el cual, la mente se desentiende del cuerpo, se disocia y concentra todos sus recursos en el foco al que es dirigida, sin perder nunca el contacto con la realidad. Y así como puedes hacer arder un papel concentrando los rayos del sol en un punto focal, reuniendo todos los recursos de un paciente en un punto, es posible alcanzar resultados inimaginables en otro contexto, como recuerdos intrauterinos.
¿En qué teorías están sustentadas las técnicas de Hipnosis?
La Hipnosis, que antes se llamó «Mesmerismo» por la obra de Franz Mesmer (1734-1815) utilizó históricamente técnicas de fascinación, de fatiga ocular, de sonidos monocordes, etc., para lograr concentrar la atención del sujeto, con un objetivo bastante similar al de los espectáculos: aumentar su sugestionabilidad hasta grados casi alucinatorios.
La obra de Milton H. Erickson (1901-1980) un genial médico e hipnoterapeuta americano, modificó radicalmente la comprensión del fenómeno hipnótico en si, expandiendo su influencia no solamente al campo de las terapias personales (Hipnosis Ericksoniana, Programación Neurolingüística, etc.) sino al de todas las áreas de la comunicación, sobre todo al de la publicidad.
Según Erickson, toda comunicación es hipnótica, en tanto intenta modificar la realidad interior del oyente. Si aceptas que la Hipnosis y la sugestión son variantes de lo mismo, te resultará más fácil entender esta definición.
¿Para qué nos puede servir la Hipnosis?
A partir de aquí te voy a contestar refiriéndome específicamente a la Hipnosis Clínica Reparadora®, que es la manera en que yo he bautizado mi desarrollo personal de la Hipnosis.
La HCR es un modelo terapéutico integral cuyo objetivo es la utilización del trance, no para inducir un cambio de conducta en el paciente, sino como una herramienta de investigación con la que hallar el o los traumas originales que se encuentran escondidos detrás del síntoma que trae el paciente. Creemos que tras los síntomas hay casi siempre sucesos traumáticos de la niñez o de vidas anteriores que los dispararon. Y que aunque nuestro paciente los ignore conscientemente, en su mente no consciente, en esa porción de la mente que está afuera de la consciencia, existe esa información y que la misma puede ser recuperada y reparadas sus consecuencias.
Es casi seguro que durante nuestra niñez, todo el mundo, hayamos experimentado cosas que no nos gustaban ¿Cómo saber cuándo alguien necesita Hipnosis?
No se trata de que alguien «necesite» Hipnosis. Lo que sí precisa es alivio a su dolor o a la molestia que siente ahora, de adulto, y la Hipnosis es la herramienta que utilizo, con todo mi respeto hacia los que utilizan otras formas de abordaje.
Yo soy psicólogo. Un paciente llega a mi consulta pidiéndome ayuda por algún problema: sufre, o tiene miedo, o tiene angustia, o es incapaz de mantener una pareja, o tiene fobias, o tiene fibromialgia, o multitud de síntomas similares. Y me cuenta lo que él «recuerda» de lo que él «cree» que le pasó. Pero la memoria usual nos juega trampas. Las cosas dolorosas se han «borrado» y en su reemplazo aparecieron los síntomas. Freud dijo una vez que el síntoma era como un «monolito recordatorio» de algo borrado de la memoria.
Simplemente, luego de escuchar el relato que hace la parte consciente del paciente, lo colocamos en Hipnosis, una Hipnosis en la que jamás estará dormido o inconsciente, y con aplicación de ciertas técnicas hipnóticas logramos dialogar con sectores de su inconsciente y obtenemos así una información adicional que nos permitirá luego aplicar técnicas de reparación.
¿Qué se logra con la Hipnosis?
Nosotros no somos científicos, somos clínicos. No estamos tratando de demostrar ninguna teoría elegante. Acompañamos al paciente cuando revive su dolor, le ayudamos a comprender, perdonar, modificar, dejar de sufrir. Un cirujano cardiovascular que atravesó con nosotros una regresión a su infancia nos dijo que, en su opinión, nosotros hacemos también como él, un verdadero trabajo quirúrgico, que buscamos el foco del problema y lo extirpamos, solo que de manera indolora, con mucho amor.
¿Qué parte de nuestro cerebro se trabaja en la Hipnosis?
Como nuestro paciente nunca está dormido, todo lo que «aparece» desde el fondo de su inconsciente pasa a ser consciente. De alguna manera, buscamos y logramos algo parecido al objeto inicial de Freud: «Hacer consciente lo inconsciente».
¿Qué riesgos tiene la Hipnosis?
No es recomendable aplicársela a personas que hayan sufrido alucinaciones, como los esquizofrénicos, para no correr el riesgo de desatarles un nuevo brote, salvo que se lo haga en combinación con el psiquiatra que lo atienda.
¿Cómo es posible que en cinco sesiones se logre «una formación completa»?, ¿no se necesita tener otra capacitación, no se necesita ser profesional para hacer Hipnosis?
Nosotros en cinco días enseñaremos a hacer Hipnosis, a hacer Regresiones a Vidas Anteriores, a hacer Regresiones a la Niñez y Reparación de Traumas de la Infancia, a aplicarlo en distintos casos, a enfrentar Fobias, Pánico, Jaquecas y otras Enfermedades Psicosomáticas y a hacer Dibujo en Hipnosis. Y todos los participantes se ejercitarán entre sí. Mi experiencia es que en todos los cursos, la totalidad de los asistentes lo logran.
¿Y luego? Cuando tú aprendiste a conducir un carro, apenas sabías donde se hallaban los cambios. Pero luego fuiste aplicando lo que sabías, con muchas precauciones hasta que te convertiste en la conductora avezada que eres hoy. De manera similar, nuestros alumnos aprenderán luego, haciendo. Quienes sean profesionales de la salud o estén en sitios de ayuda y contención a la gente, habrán adquirido una herramienta magistral que será fácilmente integrable con los recursos que ya tienen. Y todos los presentes se habrán llevado, además, recursos para comprender la vida, para crecer espiritualmente, para poder ayudar y ayudarse.
¿Cuánto tiempo duran las sesiones de Hipnosis reparadora?
La HCR se puede incorporar en el transcurso de cualquier terapia psicológica y solamente requiere de una sesión doble para poder hacer la Hipnosis, recabar la información e instrumentar herramientas de reparación. A veces, esa sesión doble, más una inicial para conocer la historia y una posterior para fijar los resultados alcanzados, son todo lo necesario. Otras veces se trata solamente del comienzo de un proceso terapéutico que será igualmente muy corto con relación a los existentes porque se trabaja sobre información certera de las verdaderas razones del problema.
Accedo a mi pasado pero, ¿cómo se repara mi experiencia, que se hace en la Hipnosis?
Sin entrar en detalles técnicos, nosotros no podemos cambiar el pasado. Pero lo que haremos es modificar la manera en que ese pasado está afectando en el presente. En muchas terapias se habla del «niño nterior». En la nuestra logramos alcanzarlo, escucharlo, confortarlo y darle protección.
Además de la HCR usted hace formaciones en Banda Gástrica Virtual. ¿De qué se trata?
La BGV es una manera mucho más sencilla de aplicar la Hipnosis, es un tratamiento probado exitosamente en 23 países, donde se hace uso de técnicas de Reprogramación Subliminal además de la Hipnosis y que da una respuesta definitiva al problema de la obesidad porque lo que hacemos es cambiar los hábitos.
Pero eso, es «otra historia» distinta, que justificaría otro reportaje.
Armando Scharovsky
Licenciado en Psicología. Director del Instituto Scharovsky
www.hipnosisclinicareparadora.org
www.bandagastricavirtual.org
Información de los cursos: 608 725 146 (Enrique)